Col Milán

  • Familia: Crucíferas (Brassicaceae)
  • Descripción: Se caracteriza por tener un aspecto similar a la col rizada, pero con hojas más tiernas y menos rizadas. Las hojas de la col Milán son de color verde oscuro y tienen una textura lisa y suave. Es una variedad popular por su sabor dulce y su capacidad para mantenerse tierna incluso después de la cocción.
  • Crecimiento: La col Milán es una planta bienal que se cultiva como anual. Crece en forma de roseta, con hojas que se expanden desde el centro. Alcanza una altura de aproximadamente 40-60 cm. Las hojas exteriores se pueden cosechar a medida que crecen, lo que permite que las hojas interiores se desarrollen y mantengan la planta viva.
  • Cuidado y necesidades: La col Milán prefiere un clima fresco y templado. Tolera bien el frío y es resistente a las heladas ligeras. Requiere suelos bien drenados, ricos en materia orgánica y con un pH neutro. Es importante mantener el suelo húmedo pero no encharcado, evitando tanto la sequedad como el exceso de agua. Se recomienda el riego regular y profundo para mantener la humedad del suelo. En cuanto a la fertilidad, se puede enriquecer el suelo con compost o abono orgánico antes de la siembra.
  • Propiedades nutritivas: La col Milán es una verdura nutritiva y saludable. Es una buena fuente de vitamina C, vitamina K, vitamina A y ácido fólico. También contiene fibra dietética y minerales como el calcio, el potasio y el manganeso. La col Milán es baja en calorías y rica en antioxidantes que pueden ayudar a combatir el estrés oxidativo y proteger contra enfermedades crónicas. Se ha asociado con beneficios para la salud cardiovascular, la salud ósea y la función inmunológica. Se puede consumir cruda en ensaladas, cocida al vapor, salteada o agregada a sopas y guisos para aprovechar sus propiedades nutritivas.